Escribiendo
Mi caligrafía busca ocultarse en un reloj
porque es incapaz de morsear con sus colmillos
el telegrama más largo (que no tuvo sílabas).
Mi letra sin rastro de tinta flota en las horas
jugando en un metro redondo con la música
en el bosque de bonsái a las escondidas.
Mi trazo busca mezclar lo blanco y lo negro, totalmente gris
dibujando dedicatorias gratuitas en tus sábanas
Como si zurciera tus medias caladas con mi voz.
He leído después tu secreto en alta fidelidad,
disipando en la hora del beso una corta letanía
A través del hilo inalámbrico de un teléfono
¿Y eso es malo?
Me preguntarás.