Falsetto, modificación del timbre y del color de la voz natural.
El falsete es una forma de emisión vocal en voces tanto masculinas como femeninas, se trata de usar la vibración de una parte de los pliegues vocales, aquellas estructuras situadas en la laringe muy cerca de las cuerdas. La idea es alcanzar notas más allá del registro normal del cantante, tanto agudas como graves. Sin embargo, es más común su uso en notas agudas. Su principal característica es el notable cambio de color y timbre de la voz al efectuarse, en comparación de la voz natural del cantante. Para ser un poco más claros hay que decir que ésta tiene que ver con el inicio del lenguaje, pareciera que fue por error, antiguamente sólo existían los sonidos de aire, el miedo produjo las palabras, el miedo te puede paralizar o movilizar. Sonidos de aceptación, sumisión, sonidos graves, medios y agudos. Ahora bien, el tono es la cualidad del sonido asociada a su carácter más o menos agudo. Así es que hay que decir que las frecuencias altas corresponden a tonos agudos, así como las frecuencias bajas a tonos graves.
Aunado a lo ya dicho el timbre es el espectro específico de una voz, tiene que ver con el sonido básico y los formantes vocales. Entonces lo relevante es que el timbre unido al tono y a la intensidad recibe el nombre de color de la voz, se trata de la cualidad que nos permite distinguir una voz de otra al escucharlas. El timbre es lo que hace que una voz sea agradable o desagradable. Si realizamos cambios en el tono, el volumen o la modulación, cambiará el mensaje que emitimos y la impresión que recibe nuestro receptor.
Ahora bien, vale la pena señalar que los registros vocales fueron identificados por monjes en la Edad Media, por Mancini en el siglo XVIII y por Manuel García en el siglo XIX. Mancini (1774) demuestra ser consciente de que la voz se localiza en diferentes partes del aparato de la fonación: pecho, cabeza y falsete, un fenómeno que hasta entonces era desconocido en Francia y Alemania; sin embargo, ya se reconoce la necesidad de buscar la unificación y homogenización durante la emisión vocal por medio de la adquisición de la técnica vocal. Se define entones que el registro vocal se trata de partes graves, medias y agudas de la voz, equivalentes a la terminología de voz de pecho, cabeza y falsete, deja implícito que hay notas de pasaje entre cada una de esas partes. Así es que desde las aportaciones de Manuel García se identificó esta condición y se definió al registro vocal como una serie de sonidos homogéneos consecutivos producidos por un mecanismo que difieren esencialmente de otra serie de sonidos igualmente homogéneos producidos por un mecanismo diferente, cualesquiera que sean las modificaciones del timbre y de la fuerza. Todo esto nos debe llevar a la consideración de demostrar acerca de la necesidad de crear mecanismos para que el pasaje de la voz cantada del agudo al grave, así como del grave al agudo, no sé de forma desigual y si de forma homogénea en toda su extensión.
Al respecto podemos mencionar lo que afirmo Enrico Caruso en su Art of Singing (1909) en el sentido de que la voz está naturalmente dividida en tres registros: pecho, medio y cabeza. En hombres cuyas voces son de más baja calidad el último de ellos es llamado de falsetto.
Hay infinidad de controversias terminológicas. Por ejemplo, Manuel García establecía una diferencia entre la voz de falsete y la de cabeza, llamadas por él de 2º y 3er registro en las voces femeninas. Pero si tomamos la definición de Cobeta, Núñez y Fernández, entendemos que el registro de cabeza constituye una subcategoría de la extensión total del registro en la voz humana, caracterizada por ubicarse en la parte más aguda, generando una vibración en la parte superior de la cabeza. A su vez, existen dos subcategorías más, registro fry y registro de pecho, las cuales delimitan los extremos graves y la parte media respectivamente. Sus denominaciones están dadas en gran medida por las sensaciones corporales que crean. Entonces hay que decir que los cantantes han denominado estos tres registros de acuerdo a las sensaciones subjetivas que producen. El registro grave produce una sensación de vibración en el pecho y la parte inferior del cuello y se conoce como registro de pecho. El agudo se denomina de cabeza en la mujer y falsete en el hombre, esto se da ya que las vibraciones se sienten en la parte superior de la cabeza. Vale la pena mencionar también la propuesta de Husson (1962), quien propone el termino bifásico, para denominar al registro de cabeza, en la mujer y el niño y falsete en el hombre. Es interesante porque de acuerdo con él, es posible identificar el inicio y fin del registro bifásico, a partir de la medida de la corriente eléctrica que viaja en fase por el nervio recurrente, de esta manera Husson, asegura que el registro de cabeza y falsete, estiman las frecuencias límites agudas entre: Sol4 (784hz), Si4 (988hz) y Re5 (1176hz).
También podríamos afirmar que cabeza y falsete es la misma en los infantes y mujeres. Así es que esto podría llevarnos a la idea de que los términos falsete y registro de cabeza son análogos, en cuanto poseen la misma extensión. otros autores como Perelló y Rabine explican que a pesar de que el registro de cabeza y falsete, están presentes en la voz masculina y femenina durante la niñez, al crecer, la voz de cabeza masculina desaparece, pero el falsete permanece.