Inmersión digital híbrida y la nueva dimensión de la realidad aumentada
Este fin de semana llamaron mi atención diversos modelos de entretenimiento en el que destacó una oferta híbrida para el disfrute del contenido, entre las finales de fútbol, el espectáculo de presentación de la final de la Liga de campeones de la UEFA en la que el artista Marshmello brindó un gran espectáculo digital, emulando utilizar realidad aumentada en el estadio de fútbol, lo cual, sin duda apenas es el proyecto de lo que un día, no muy lejano podremos experimentar no solamente en nuestras pantallas, sino completamente en vivo, al punto de que será posible intercambiar experiencias simultáneas de manera virtual en espectáculos públicos; por otra parte, el impacto económico en la industria cinematográfica flexibilizó los tiempos de liberación de las versiones de sus principales títulos, lo que me permitió contratar video sobre demanda, cerrar las persianas, preparar palomitas y nachos, y disfrutar de una tarde de película con mi familia como en los viejos tiempos del cine, desde la comodidad de mi hogar; finalmente, me llama la atención el relato de nuestras experiencias familiares en las cuales mis hijos me relatan sus aventuras con sus amigos, tal cual como si hubieran salido a jugar en la colonia, con la diferencia de que todas sus aventuras se desarrollaron a través de plataformas en línea y que la relación con sus amigas y amigos se llevó a cabo a distancia, sumado a que como noticia relevante, esta semana se llevaron a cabo las primeras pruebas piloto del regreso presencial en el que las niñas y niños acudieron con gran alegría a conocer, en muchas de las veces, a las y los compañeros que integraban su grupo en el presente ciclo escolar, que está por terminar, pero que tampoco encuentra urgencia debido a que el modelo virtual había quedado implantado adecuadamente, y, el modelo híbrido, sobre todo el relativo al regreso a la cotidianeidad de la enseñanza nos genera los primeros retos, algo sin duda paradójico, y que no es eminentemente por el medio presencial, sino por la adaptabilidad hacia un modelo híbrido que permita dar atención presencial y virtual, simultáneamente.
Si bien, es posible poner en duda por el momento en el ámbito educativo la implementación de un modelo híbrido integral, es decir, en el marco de las actividades de cada uno de los grupos y cursos lectivos, sino que, más bien apunta a la creación de grupos especiales que puedan mantener un entorno meramente presencial y otros que cuenten con un acompañamiento meramente digital, este modelo híbrido es posible que prevalezca mientras no se tenga a la población infantil vacunada, y/o que las circunstancias obliguen a que las y los menores, regresen de manera completa a las aulas, aunque, ya conforme a las pruebas piloto existe un gran avance, que pudiera cerrar la brecha para que la totalidad del alumnado regrese a la actividad presencial.
El periodo de confinamiento preparó un nuevo escenario en la industria del entretenimiento, sino en la forma de interacción social, al buscar adaptar a modelos digitales todos aquellos modelos de negocio que existían en el entorno físico, y que, actualmente se diversifican cada vez más intensamente hacia los entornos digitales con bienes y servicios meramente digitales, como los NFTs, denominados tokens no fungibles, o, aquellos archivos que permiten conservar de manera única una creación determinada almacenable en el ámbito digital, como podría ser una pintura, un video o una canción, que a su vez pueda ser atribuible de manera única a una persona, y que, de manera equivalente y funcional equiparable al ecosistema blockckain, no solamente puede ser utilizada a manera de bien de consumo, sino que además, puede dar lugar a un nuevo modelo de gestión de la propiedad intelectual, permitiendo además de los pagos correspondientes, la atribuibilidad única a un titular con lo cual, se le brinda un carácter único de tipo afectivo.
No obstante, regresando a la inmersión digital, es sorprendente advertir como cada vez más la brecha en torno a los servicios que se brindan de manera presencial y los que se brindan de manera virtual se cierra y se complementa a fin de hacer un negocio más grande, por una parte, mejorando la experiencia de la afición en los eventos en vivo a través de experiencias interactivas digitales a través de la realidad aumentada, así como, incrementando el número de consumidores, espectadores y usuarios que con una configuración adecuada pueden a través de la mezcla entre realidad virtual y realidad aumentada, generar experiencias irrepetibles que les permitan interactuar con sus deportistas y artistas favoritos desde la comodidad de sus hogares, lo cual, a su vez abre la posibilidad de generar cadenas de suministros a través de las aplicaciones que ofrecen comida a domicilio para complementar la experiencia a través de las sensaciones culinarias.
Es así que el modelo holográfico que se ha implementado en una universidad mexicana si bien deviene interesante, eventualmente podrá dar paso a universidades virtuales que permitan a través de este tipo de tecnología interactuar entre alumnado y profesorado de manera completamente digital, sin perjuicio de que se utilice la infraestructura existente no para sustituirla, sino para generar experiencias más interactivas e integradoras del espectador con su entorno, a fin de garantizarle pleno protagonismo equiparable al ámbito físico.
Esto puesto que, si bien pudiera parecer que la pandemia -ahora sí- está en sus últimas olas, y, las actividades presenciales y físicas están a punto de ser reactivadas de manera total, no puede perderse de vista todas las capacidades digitales que se generaron en el periodo del confinamiento, y que, eventualmente representarán una ventaja para las empresas que hayan aprovechado dicho periodo, para hacer de sus negocios, modelos híbridos que permitan una mayor inmersión y fidelización de sus usuarios, a través de una mayor integración e interacción de las empresas con los entornos digitales.
Lo anterior, con el objeto de que cualquier actividad a cargo de las personas pueda encontrar su equivalente en el ámbito digital a fin de incrementar la participación de las personas en los diversos ámbitos y de disminuir las brechas existentes puesto que si bien, la existencia de estos mecanismos virtuales y de manera remota, el día de hoy deben agradecerse como un privilegio circunstancial, eventualmente el día de mañana, constituirán alternativas para que cualquier persona, con el acceso al habilitador básico, como puede ser un smartphone, pueda ser considerada de manera efectiva como una persona integrante con voz y voto dentro de la sociedad de la información y el conocimiento, y que dicho instrumento, pueda constituir la herramienta que les de acceso no sólo a la información, sino a una serie de apoyos básicos que les permita mejorar sus condiciones de vida en cualquiera de sus ámbitos, a través de los servicios digitales.
Hasta la próxima.