LA INSPIRACIÓN DE LOS PUNTOS SUSPENSIVOS

……………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………………    y así hay días donde los puntos suspensivos no tienen fin porque simplemente no tengo la más santa o terrible idea sobre qué escribir. A veces pienso que es absurdo cuando dicen Pero a los redactores, a los columnistas, les fluyen las palabras, son comunicadores, comunicar es lo más fácil que se les da. Es ahí donde me caso con el famoso dicho: En casa de herrero, cuchillo de palo, porque no es cierto, no siempre los columnistas, saben qué escribir, es más, diría que casi nunca saben, simplemente esperan que su mente reproduzca palabras de la nada, y la dejan ser.

Les informo que hoy mi mente, está agotada. No le da por reproducir, ni un cuarto de letra. Para escribir, todos tenemos distintos estilos, algunos nos inspiramos en imágenes, otros nos inspiramos en recuerdos, otros, a veces … nos quedamos en puntos suspensivos porque no encontramos inspiración alguna, a pesar de tener mil motivos para tomarlos como inspiración. Tengo un gran amigo, el mejor para ser exacta, que es escritor, con un bagaje muy largo en las letras y varios por no decir muchos libros publicados. Él, simplemente se levanta, se sienta y escribe inspirándose en una imagen, yo, así, simplemente no puedo, me pasa de vueltas.

Les confieso, nuevamente (perdonen que lo repita constantemente) que hoy no puedo escribir, ni con una imagen ni con un libro ni con un suceso específico. Hoy estoy en puntos suspensivos, no puedo escribir, he revisado las noticias, he revisado las redes, tratando, como de costumbre, de alimentarme de todos los sucesos importantes o atractivos a nivel mundial, y no encuentro ninguno que me motive a soltar mi libre pluma. En un momento, me preocupé y pensé que estaba deprimida, que tal vez estaba viendo el cielo gris y no lograba encontrar los colores del arcoíris, pero por ahí no va, al contrario, estoy contenta, agradecida, empezando el 2023 con la mejor vibra, ganas y fuerza, pero simplemente estoy envuelta en mis famosos puntos suspensivos que me atrapan, me abrazan, me arrastran y no me dejan tomar un tema y explayarme sobre él y no sé si cabe o no, pero les pido perdón por eso. ¿Y saben? Creo que sí sé porque el origen de mis puntos suspensivos el día de hoy. Porque en mi inconsciente analista y racional, se me dio por hacer una repasada del año que se fue, el 2022, y luego en mi consciente sensible, apasionado y humano, me doy cuenta que el 22 nos dejó agotados, sin inspiraciones, con la esperanza, muy débil, que el mundo será mejor y que el ser humano va a prosperar y tratar de ser digno de llamarse humano y producto de eso, ahora tenemos: una crisis mundial apoteósica, una pandemia bélica  que no tiene fin y que cada vez que pensamos que la mascarilla ya pasó a mejor vida, vuelve, porque el virus no nos suelta, se reproduce, tiene mil versiones y sinceramente no sé cómo hace para tenerlas.

Por otro lado, los países en guerra, que dan a luz a la pobreza y a la muerte, las economías rotas en picada, miles de empresas quebradas, cantidad de desempleados aumentando a pasos agigantados, millones de familias que se mueren de hambre y roban y matan por ello, personas desaparecidas, cuyo destino es terminar en la red de tráfico de órganos, trata de blancas, luego, el narcotráfico que muchas veces lleva al lavado de dinero, el infaltable terrorismo (cabe recalcar que el Perú está luchando para volver a vencerlo), que lleva a la violencia y exterminio del ser humano sin consciencia, la extinción de animales, que genera en los rescatistas y animal lovers desasosiego e impotencia, porque no les cabe en la cabeza por qué animalitos inocentes tengan que morir, a causa del insaciable y cruel deseo del hombre de exterminarlos por puro placer y dinero, sin ser menos penosos,  los terribles y exagerados cambios climáticos severos nunca antes vistos causando graves pérdidas y  muertes, dejando a mucha gente sin hogar y sin empleos también, y así podría seguir escribiendo de mil sucesos más que se están dando a nivel mundial, porque nadie se salva, ni un país esta ileso de tener algo de lo mencionado arriba u otras cosas más.

¿Y saben qué?, no puedo escribir con ese contenido, hoy no puedo, mi mente agotada prefiere quedarse entre puntos suspensivos porque en ellos encuentra suspenso, la esperanza de que mañana habrá un suceso distinto en el mundo, que convierta de tres puntos suspensivos un punto final, algo positivo, que marque las memorias de todos nosotros y sobre todo de nuestros hijos, los futuros humanos del mundo, algo positivo, algo por lo que, sin duda alguna, valga la pena hacer historia a través de una pluma, para ser exacta, mi humilde pluma………………………………….