MEXICO ANTE EL CAMBIO CLIMATICO PARTE 1
El cambio climático es un tema de urgente atención y todos los sectores de la sociedad somos corresponsables en el combate a este fenómeno global. El aumento de la temperatura generado por la actividad humana tiene un potencial catastrófico para México, por problemas como la pobreza y falta de infraestructura.
En este sentido estimado lector le comparto la primera parte de dos sobre la problemática y algunas propuestas para combatir el cambio climático en nuestro país, el cual dista de tener soluciones concretas en el actual gobierno de Andrés Manuel López Obrador , así como en administraciones anteriores, cabe señalar que cada una a su estilo y a su esfuerzo genero acciones también relevantes y beneficiosas.
La problemática se basa en un aumento mínimo en la temperatura del planeta tiene repercusiones catastróficas tanto para el ambiente como para las sociedades, y México debe encender las alarmas porque será uno de los países que sufre y sufrirá más estos efectos, coinciden especialistas que participaron en el nuevo reporte del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés).
Hoy el planeta es en promedio 1 grado centígrado más caliente que en tiempos preindustriales, por ello el informe especial – comisionado por la ONU y publicado el pasado lunes – hace un llamado a los gobiernos para que adopten medidas urgentes que limiten el aumento de la temperatura. Este incremento continuará y de llegar a 1.5 grados, provocará un desastre, pero ese no es el peor de los escenarios. Según los expertos del IPCC, que el planeta sea 2 grados más caliente llevaría a la desaparición casi total de los arrecifes de coral, al aumento del nivel del mar en 46 centímetros, acidificación del océano, la caída en la productividad del maíz, arroz o trigo y llevará a que el 37% de la población mundial esté expuesta a calor severo al menos una vez cada 5 años.
México será testigo de “impactos importantes” derivados del cambio climático debido, entre otras cosas, a que es un país con un alto porcentaje de personas en situación de pobreza (54 millones, según cifras del Coneval), así como niveles de desarrollo y capacidades diferenciadas en cada región y ciudad del país. Además existe una vulnerabilidad a diferenciada a los distintos impactos del cambio climático como pueden ser lluvias extremas, inundaciones, sequías, ondas de calor. Uno de los objetivos que me parecen centrales de la política climática de este país debería ser conocer las vulnerabilidades, a qué riesgos estamos expuestos y estaremos expuestos de aquí a 2030.
Tenemos problemas críticos que se nos vienen de manera directa porque somos un país muy vulnerable, estamos muy expuestos a los eventos climáticos, los vemos año con año con los huracanes, por el Océano Atlántico y el Pacífico, tenemos problemas de sequía, ondas de calor, no les hemos dado atención suficiente a los impactos actuales de los efectos del cambio climático ni nos hemos planteado a futuro cómo hacer que resulten menos catastróficos y en cómo reducimos la vulnerabilidad.
A México le conviene mucho que los objetivos a nivel internacional sean los más estrictos posibles, porque es uno de los más vulnerables a nivel mundial ya que somos un país megadiverso, donde hay pobreza, cuestiones de infraestructura que hacen que un futuro de 1.5 grados sea mucho menos catastrófico para México que un futuro de 2 grados en el aumento climático. Además de la falta de atención, también hay falta de recursos para atender las necesidades que trae el calentamiento global.
Entre las medidas planteadas en el estudio para limitar el aumento en la temperatura del planeta, se encuentra reducir las emisiones de CO2 en un 45% de aquí a 2030 –con respecto al nivel registrado en 2010– y que las energías renovables pasen de 20% a 70% hacia 2050. Además, los especialistas señalan que se necesitarán inversiones anuales de 2 mil 400 millones de dólares entre 2016 y 2035 para transformar los sistemas energéticos.
Finalmente la política científica en México debe preponderar y fomentar la investigación no nada más meteorológica y climatológica, sino de cambio climático, es decir para poder conocer las interacciones entre atmósfera, biosfera y antropósfera.
En la siguiente publicación de #RespiraLaVida abordaremos algunas propuestas para enfrentar esta problemática ambiental y humanitaria.