NO HAY QUE BUSCARLE RUIDO AL CHICHARRÓN

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Los proverbios tienen una larga historia y han sido parte integral de la tradición oral en diversas culturas alrededor del mundo. Su origen se remonta a tiempos antiguos, donde la sabiduría popular se transmitía de generación en generación a través de historias, cuentos y expresiones cortas como los proverbios.

En el caso específico de los proverbios mexicanos, su origen se encuentra en la rica herencia cultural del país, que ha sido moldeada por la fusión de diferentes culturas y civilizaciones a lo largo de la historia. Los proverbios mexicanos reflejan la sabiduría acumulada a través del tiempo por la sociedad mexicana, y abarcan temáticas que incluyen la vida cotidiana, la naturaleza, la moral, la convivencia y la experiencia.

Estos proverbios suelen ser breves y contundentes, lo que los hace fáciles de recordar y transmitir. Además, a menudo se expresan en forma poética o metafórica, lo que les da un toque especial y los hace más atractivos para su transmisión oral.

Nuestro México es reconocido por su cultura popular y variada en función a la basta riqueza de sus regiones, por ello, es importante mencionar que los proverbios pueden variar según los estados y la comunidad dentro de México, ya que cada una tiene sus propias tradiciones y costumbres que influyen en las expresiones y enseñanzas populares.

  • De guía nos ha de servir para toda la conciencia la justicia, la razón y de apoyo la prudencia, pues no se sabe olvidar, que lo que es muy provechoso en abusándose de ello, puede volverse en dañoso.
  • Está bien que seas virtuoso y que tengas devoción, más cuida de no tocar hasta la exasperación, porque el que le da por santo bien se puede asegurar, que en llegando a resbalarse al infierno va a parar.
  • El camino nunca es largo si se evita un precipicio, esto la prudencia enseña y lo aconseja el buen juicio; pues es sin duda mejor el gastar tiempo rodeando que el querer llegar muy pronto exponiéndose a ir rodando.
  • Los hombres que no discurren carecen de discreción, no tienen voluntad propia obran por imitación, y se pueden comparar a las ovejas que bobas por donde una de ellas salta por ahí la siguen todas.
  • Un consejo voy a dar a el herido de la pena y que no debe rehusar por ser medicina buena: si un momento reflexiona y se pone a estar cantando con este grato ejercicio irá su mal espantando.

  • Aléjate del malvado, tolera a los ignorantes, desprecia a los petardistas, y abandona a los pedantes, busca y podrás encontrar a el hombre que sea de bien seguro de que por serlo todo lo debe hacer bien.
  • El que juzga de los hombres por su traje o compostura, es un torpe es un ligero porque su juicio aventura, para que bien se persuada de un ejemplo yo me valgo: si a un palo tosco se viste se ha de ver que parece algo.
  • Que es grande el saber del hombre ninguno podrá negarlo, y que cada día adelanta preciso es el confesarlo; más no obstante su poder y aunque lo tuviera doble de un golpe no ha de tirar el bien arraigado roble.
  • Lecciones que el mundo da, todas deben escucharse y en el trato con los hombres a su tiempo aprovecharse: porque es dichoso el mortal que por librarse de penas puede tomar escarmiento en las cabezas ajenas.
  • Si eres franco y placentero tu sueño será agradable, vivirás sin inquietudes, serás un hombre apreciable; más si eres observativo, imprudente o malicioso en los días de tu existencia ni uno tendrás de reposo.