Toluca sin consistencia

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CUANDO un equipo quiere ser campeón debe tener consistencia en su manera de jugar, es decir, un plantel con rendimiento parejo, con relevos que le den nueva dinámica, con eficacia en cada partido, con anotación de la mayor cantidad de goles, con la aceptación de la menor cantidad posible; esto es, un equipo equilibrado que no lo tuvo el Toluca durante todo el torneo y que fue su talón de Aquiles, lo que finalmente le costó la posibilidad, primero, de ser líder y luego la de no saber conservar el segundo lugar en la tabla de posiciones.

ANTE LAS defensivas endebles como la del Atlas que recibió 21 goles o como la de Atlético de San Luis que recibió 22, el Toluca fue contundente, pero con defensivas poderosas como la del Cruz Azul, la segunda que menos goles recibió con 14, simplemente no pudo.

A TODO ESO hay que agregar las decisiones técnicas de Renato Paiva, quien durante el campeonato tardó bastante tiempo en encontrar a su 11 ideal y que en el juego ante Cruz Azul se decidió por Araújo en vez de Domínguez, el movimiento no le resultó, ya que si bien Araújo anotó un gol que fue anulado por fuera de lugar, nos dejó la duda sobre la mayor movilidad de Juanpi quien se mostró efectivo en otros partidos y sobre todo desequilibrante y dominador del lado derecho, en cambio Araújo jugó a pierna cambiada.

LA FALTA de rendimiento parejo se observó ante Cruz Azul, en el hecho de que Jean Meneses no brilló con la misma intensidad que lo hizo ante San Luis y Angulo, aunque se hizo de la titularidad, tampoco mostró constancia en su rendimiento, sólo enseñó destellos de sus posibilidades.

PARA colmo, Guamerucito García dio su peor partido de la temporada con entrega de balones y acciones fallidas que, por fortuna, no le costaron más al TolucaPereira quien junto con Volpi fueron los hombres de hierro de los Diablos Rojos, ya que jugaron cada uno los 1530 minutos en los 17 juegos; Pereira no alcanzó el centro enviado por Rotondi en tiro libre por falta de Juan Escobar, es decir a balón parado y permitió el remate contundente de Wiler Dita, mismo que marcó la derrota del Toluca y su incapacidad para sostener el subliderato.

GRAVES errores del Toluca a balón parado, se incluye a toda la defensiva y las no salidas de Volpi.

EN EL CASO de Volpi, falló dos tiros penales. El primero pegó en el poste y salió; el segundo, golpeó la base del poste, rebotó hacia donde estaba el brasileño quien tropezó y no pudo contrarrematar. Su racha de 15 penales sin fallar se perdió y en ¡qué momento! En su descargo debo decir que lo largo de 70 años de ver futbol, no he conocido a un jugador infalible en los penales, ni Pelé, ni Maradona ni Messi ni Cristiano Ronaldo ni Cardozo ni Ceni ni Chilaver, estos dos últimos porteros goleadores, se salvaron de fallar.

AL FINAL en la conferencia de prensa, Paiva defendió a su portero y amigo (así lo dijo) Thiago Volpi, quien por segunda vez en el torneo salió abucheado. Considero que la situación es indefendible, porque en los 15 penales que sí anotó el portero goleador salió aplaudido y ni Volpi ni Paiva agradecieron los aplausos; entonces, tampoco se vale reclamar, porque finalmente son reconocimientos del público, sobre un acierto o una falla, en este caso dos.

PAIVA y sus muchachos tienen toda una semana para aprender de sus errores y subsanarlos. Afrontar la liguilla con posibilidades, primero de triunfo y después de llegar a la final. Por lo pronto el Toluca la cruzazuleó, como lo señalé el viernes pasado en el programa Peña Futbolera.