ALGUNOS VIAJARON HASTA 9 HORAS PARA ACUDIR A LOS 100 DÍAS DE CLAUDIA
“Estamos aquí porque queremos, aunque sí hay algunos que vinieron de parte de una diputada pero casi todos quisimos viajar más de nueve horas desde varias comunidades de Oaxaca como Cuilapam, de la Mixteca y Pinotepa”, declaró Carmen que acompañaba a la banda de música compuesta de niños y niñas en su mayoría, portando trajes típicos para demostrar que el amor que sienten por la presidenta con “a”, es sincero y real durante sus primeros 100 días de gobierno.
La realidad fue distinta de la mayoría de los que llenaron las miles de sillas en la explanada del Zócalo capitalino, pues algunos no solo viajaron nueve horas desde Oaxaca, sino también desde Xalapa en Veracruz, de Querétaro, Tabasco, Coahuila, Jalisco, así como del centro del país como el Estado de México, especialmente integrantes del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), los cuales crearon una mancha agigantada de anaranjado en el corazón del espacio.
“Estamos aquí desde las cinco de la mañana, aguantamos frío, lluvia y también hambre pero nos toca cumplir como maestros, demostrar nuestro apoyo con la Doctora Sheinbaum”, relató Salvador, docente perteneciente a la región 36, la cual cubre al Valle de México.
Aunque la espera fue larga, de poco más de cinco horas para cada uno de los que pusieron pie en aquella carpeta asfáltica, el momento en el que apareció la presidenta de México portando un traje rosado, hizo que el cansancio se desvaneciera y los aplausos llovieran cuales gotas de lluvia de una noche anterior, que también fueron acompañadas de un temeroso sismo de 6.1 grados en la escala de Richter entre 2:30 a 2:45 horas de la madrugada.
“Hemos recorrido los 32 estados, por eso nos eligieron para dar continuidad a la Cuarta Transformación, no vamos a regresar al modelo neoliberal, no vamos a regresar a régimenes de corrupción y privilegios”, lanzó como primer parte del discurso la mandataria, quien acompañó dichas palabras con un “nosotros no traicionamos nuestra bandera (…) y a quienes afirman que las mujeres no gobernamos porque no tenemos capacidad o inteligencia, a esos que aún no han entendido que las mujeres podemos, también tenemos la fuerza, la entereza, el temple y la capacidad para ser bomberas, astronautas, abogadas y comandantes supremas de las fuerzas armadas”.
El torbellino de palmas, unas sobre las otras, estremecieron los recovecos de los edificios que rodean al Zócalo, pues durante los 100 días transcurridos, la presidenta ha cumplido, según su discurso, con aumento de salario mínimo, con 39 mil millones de dólares de inversión, 4 millones 100 mil niños y niñas que tendrán becas de primaria; así como 95 mil 819 campesinos con apoyos con precios de garantía, así como recibir apoyos del programa sembrando vida, además de la construcción de vías férreas que conectarán distintas partes del país, dentro de los cuales se incluye el Tren Interurbano México-Toluca y el Tren Maya.
Con lo anterior, agregó hacia sus adversarios que “como hay presidenta con A, por primera vez se reconoce el trabajo de las mujeres mexicanas”, ya que con base en sus palabras no solamente son las que más carga llevan en los hogares por el cuidado de los integrantes de la familia, sino para proveer alimentos, limpieza, educación, roles, entre otros.
Recordando el lema “no llego sola, llegamos todas”, enfatizó en las reformas hacia la comunidad indígena, mejor conocida como la reforma constitucional que reconoce los derechos de los pueblos indígenas y afromexicanos, la cual incluye a las mujeres que pertenecen a ambas comunidades, por lo que sonidos de matracas se escucharon y gritos de “¡es un honor estar con Claudia hoy!”.
Aprovechando la euforia de los asistentes, resaltó en otro tema, que los trabajadores mexicanos y migrantes mexicanos en Estados Unidos de América, deben ser respetados y valorados por la entrega a su labor, pero sobre todo por el beneficio que le dan al país del norte, puntualizó “hemos tenido momentos dolorosos en nuestra historia pero resalto los buenos momentos, de soberanía y apoyo”.
Asimismo, destacó también en la buena relación de respeto y colaboración con el presidente Andrés Manuel López Obrador y su homólogo Donald Trump, especialmente en términos de comercio, que ha beneficiado hasta ahor no solo a México sino a Canadá y Estados Unidos.
Lo anterior también vino a mención por la incertidumbre que se cuela entre el pueblo mexicano, que se siente amenazado o atemorizado por los comentarios que últimamente ha hecho el recién electo presidente del país norteamericano, “estoy convencida que la relación México-Estados Unidos será de respeto. México es un país libre y soberano”, lo que ocasionó el estallido de las miles de personas que desde temprana hora del día esperaron por verla
Al finalizar el discurso, se cantó el himno nacional y se escucharon algunas preguntas de los asistentes: ¿hará esto cada 100 días? Porque de ser así hay que prepararse.
Le acompañaron
Además de los integrantes de su gabinete, algunos gobernadores de diversas entidades incluidas Nuevo León con Samuel García y Delfina Gómez Álvarez gobernadora del Estado de México.