EL DESEO CONSCIENTE Y LA LUNA
LO QUE VÍ: Recuerdo muy bien una tarde de principios de los setentas, cuando veníamos por carretera del entonces Distrito Federal y el crepúsculo nos regalaba una postal increíble del momento en que los rayos de un sol menguante, apuntaban directo al ferrocarril México-Toluca, justo en el ciclorama que enmarcaba el proscenio ocupado por la laguna de Salazar en el paraje de la marquesa, era un espectáculo increíble y gratuito.
Siguiendo la carretera, de pronto veíamos en el horizonte el Nevado de Toluca, majestuoso y siempre con sus picos encanecidos por la nieve. Ya al llegar el mítico, descuidado y cada día más deteriorado arco de un descolorido amarillo que daba la bienvenida a la ciudad de Toluca y que rezaba: Toluca es la provincia y la provincia es la Patria, inolvidable frase del poeta toluqueño Horacio Zúñiga Anaya. Ya nos sentíamos en casa, y si además, pronto aparecía ante nosotros el monumento a la bandera inaugurado en tiempos de Wenceslao Labra, la sensación era de estar ya en casa ingresando por la avenida Hidalgo, pasando por el tradicional restaurante Caleta, ¿quien no recuerda sus ricas tortas?, hasta llegar a Los Portales; después nos topábamos con la famosa Alameda, seguíamos por la bonita avenida con camellón arbolado, hasta llegar a la famosa Cama de Piedra, hoy ya sin cama, ni piedra, pero para los toluqueños baby boomers, sigue siendo ese punto de referencia. Y ahora sí, llegó a donde quería llegar, al cerro de la teresona, cada día más árido y trasquilado por el avance de la mancha urbana.
El cerro de la teresona, es el más preciso y sincero monitor que acusa el deterioro ecológico del Valle de Toluca. Cada día más casas pero no menos árboles, porque los pocos que hay, fueron sembrados por Don Manuel Villaverde y sus ciclistas en los años 50.
Esta romántica y nostálgica narrativa, pretende sensibilizar sobre lo que hemos hecho de nuestra casa grande en los últimos 50 años, ante el deterioro ecológico y del paisaje y reflexionar en la herencia a nuestros descendientes que acaso se animen para hacer este sencillo inventario de símbolos de nuestro paisaje urbano pero en 2070.
Viene un tiempo de reflexión generalizada en donde pienso que valdría la pena hacer un repaso de nuestro entorno, para tener el deseo consciente de preservarlo y por qué no, mejorarlo.
LO QUE OÍ: Platicando con una buena amiga toluqueña, humanista, ecologista y experta en los menesteres propios de la Lunalogia, le pregunté qué podíamos hacer por nuestra querida ciudad a lo que me contestó: Tener el deseo consciente de hacer algo por nuestro entorno, la pandemia, nos ha regalado bellos momentos de introspección, sin embargo, ahora estamos a punto de entrar a una nueva etapa, mira, t explico:
El próximo sábado 4 de diciembre habrá un eclipse total de sol en Sagitario y será el último en este signo zodiacal hasta diciembre de 2029. Se da junto al perigeo y será una super luna nueva con doble efecto. Recordemos que en astronomía, el perigeo es el punto de la órbita de la Luna en el que existe menos distancia con respecto al centro de la Tierra. El perigeo es el punto más cercano y el apogeo el más distante.
Se da en el grado 12º del signo, si tienes planetas o punto allí, espera un fuerte efecto. Nos impulsa a un reinicio con tremenda energía; el ciclo de manifestación se cierra con la luna llena en Sagitario el 14 de junio de 2022. Será visible solo en el extremo sur del mundo, como la Tierra del Fuego o el sur de Australia.
Los días previos experimentaremos mucho cansancio y posibles crisis. La luna previa será en Escorpio y pedirá mucha transformación. Los eclipses solares son un renacimiento. Pero para renacer, primero tenemos que morirnos un poco… disolvernos… des-identificarnos. No temas, cuida tu energía y prepárate para renacer en tu esencia más pura.
LO QUE LEÍ: Desde la antigüedad, la astrología ha sido una de las fuentes de sabiduría más fidedignas que la humanidad ha tenido a su alcance. Si bien la astrología en sí no dispone de herramientas para hacer realidad tus sueños. Hay, sin embargo, una excepción: el deseo consciente.
El deseo consciente no es un medio para descubrirse a uno mismo ni una técnica para predecir el futuro. No importa quién seas o bajo qué tipo de estrella hayas nacido. El deseo consciente es un método para hacer realidad tus sueños. Y utiliza el sistema astrológico de los doce signos del Zodíaco con ese propósito. El deseo consciente, es un método proactivo de astrología aplicada.
El método del deseo consciente es el arte secreto de manifestar los deseos de tu corazón. Es una técnica para hacer realidad tus sueños y que hasta ahora no se había enseñado. Un deseo consciente es básicamente un deseo de Luna nueva, un deseo formulado cuando la Luna se encuentra en el novilunio de su ciclo mensual; no obstante, va mucho más allá. El motivo por el que lo denomino deseo consciente es porque esta técnica en realidad tiene el poder suficiente para mover el universo.
Cuando pides un deseo con Luna nueva, se cumple: es un hecho indiscutible. La Luna nueva es un fenómeno que se produce cuando la Luna se encuentra en conjunción perfecta con el Sol. Como se corresponde con el día cero del ciclo lunar, si se tratase de un ser humano equivaldría a un recién nacido, lo cual significa que todo crecimiento comienza aquí. Cuando siembras la semilla de un deseo con Luna nueva, da fruto. No es cuestión de magia. En lo tocante al ciclo del universo, es absolutamente natural.
¿En qué consiste el método del deseo consciente, de luna nueva y luna llena? A diferencia de la mayoría de los astrólogos, que leen el flujo de todas las cosas principalmente a través de los signos solares, se utiliza la Luna como lente. Esta es la diferencia fundamental entre la astrología común y esta rama de la astrología, denominada lunalogía. La lunalogía es un método para buscar atraer la buena suerte a través de la Luna, y consta de tres elementos:
- Signo lunar personal:Tu signo lunar personal refleja tu fuerza gravitatoria innata: el poder de atraer cosas a tu vida. Es tu signo lunar, no tu signo solar, el que atrae todas las cosas que conducen a la felicidad, como las oportunidades profesionales y amorosas, las vocaciones innatas, las fuentes de ingresos y las almas gemelas. ¿Por qué? Por la fuerza gravitatoria de la Luna. La clave para alcanzar la fortuna y la felicidad es sacar el máximo partido de tu signo lunar.
- Signo lunar diario:La Luna transita por cada uno de los doce signos del Zodíaco cada dos días y medio, completando un ciclo en veintinueve días y medio aproximadamente. Cuando sabes en qué signo se encuentra la Luna en cualquier día dado y tomas las medidas oportunas (en tu forma de vestir, comer, vivir, actuar, ver y pensar), sintonizas con el ritmo del universo, lo cual te traerá buena suerte. Si adquieres la costumbre de vivir en armonía con el signo lunar diario, triunfarás de manera natural.
- Deseo consciente: El deseo consciente es un método de manifestación que saca el máximo partido tanto de tu fuerza gravitatoria innata (el signo lunar personal) como de la fuerza gravitatoria de la Luna (el signo lunar diario). Es una manera sumamente precisa de manifestar los deseos y sueños utilizando la fuerza gravitatoria de la Luna en su cenit cada mes, con luna nueva y luna llena.
¿Por qué funciona formular deseos a la Luna? La Luna nueva, un fenómeno que se produce cada mes, es el día en que la Luna y el Sol se hallan en conjunción perfecta. Mucha gente tiene por costumbre poner por escrito sus sueños y deseos ese día, pero ¿sabes por qué los deseos se hacen realidad cuando los escribes con luna nueva? La Luna es el único satélite de la Tierra, una presencia que conecta la Tierra con el universo. Imagina un «servicio técnico de la Tierra» que actúa como enlace entre quienes vivimos en la Tierra y los demás planetas del sistema solar. La Luna, nuestro servicio técnico particular, traslada nuestros deseos al universo. La Luna no es la única que juega a tu favor; en sentido estricto, es el universo el que materializa tu deseo. Aun así, no cabe duda de que la manera más efectiva de transmitir deseos al universo es a través de la Luna, dado que esta ha servido de servicio técnico a la Tierra desde hace más de doscientos millones de años.
Esto es lo que nos propone Keiko, la astróloga más reconocida de Japón, en su libro: The Power Wish (Penguin 2021).