Hija Dividida

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Me tengo que apurar a hacer mi tarea, mi papá no tarda en pasar por mi. ¿Qué a dónde me va a llevar? Pues a su casa, este fin me toca pasarlo con él y con su esposa y con mis hermanos.  Bueno, mi medio hermano y con los dos hijos de ella. Debo confesar que al principio no me caían bien, sobre todo la chava que es mayor que yo, se cree la última bebida refrescante del desierto. Y mi hermano, creo que le gustaba, o sea, sí está guapo el tipo, pero no me imagino saliendo con mi hermano, sí ya sé que no somos hermanos de sangre, ya que es hijo de la actual pareja de mi papá. Aún así sería extraño, ¡qué oso! O sea no, ¡cero que ver! Así que mejor, tratamos de llevarnos como hermanos y mejor él me presentó a su amigo que me parece lindo. Pero a la que sí de plano no soporto es a mi hermana, luego hace unos comentarios que cero que ver. Pero bueno, no le demos importancia a ella. 

Mejor hablemos de mi hermano, bueno, medio hermano, ya que ese sí lleva la sangre de mi papá… pero también, la de su esposa, así que es mi medio hermano. Yo lo quiero mucho y él me quiere a mi. Tratamos de ser una familia de lo más normal. Sí, ya sé que puede sonar muy raro pero así nos tocó vivir. Además, mis papás peleaban mucho, me dice mi mamá que mi papá nunca soportó que ella ganara más que él, ya que ella, me dice, es más exitosa en el ámbito profesional. 

Recuerdo que cuando fueron mis Quince, mi papá me organizó una fiesta, pero no invitó ni a mi mamá ni a nadie de su familia. Aunque la pasé muy bien, me dio algo de tristeza porque no pude estar ni con mi mamá ni con nadie de mi familia materna, extrañé mucho a mis abuelitos y a mis tíos, en especial a mi tía con la que me llevo súper padre. Y ni hablar de mis primos, ninguno fue invitado por mi papá. Sólo estuve con la familia y amigos paternos. Me la pasé bien, pero sí extrañé al otro lado de la familia.

Creo que mi papá lo hizo en venganza porque mi mamá me llevó de viaje a Europa, fuimos a conocer, Sevilla, Paris, Londres, Amsterdam, Berlín, y Roma, estuvo increíble ese viaje. Claro que nos acompañó su novio.  

¿Y de mi mamá qué? Ah, bueno, pues déjenme decirles que ella tiene un novio, y ese novio tiene un hijo, él es mucho más mayor, ya anda en sus veintes, me cae muy bien. Mi mamá está buscando embarazarse de su novio, pero aun no lo logra. Dice que ya se le está pasando el tren y que quiere tener otro hijo, que no importa si es mujer, o varón, pero ella insiste en embarazarse.  

He buscado que mis papás hagan las pases, pero está complicado sobre todo porque mi papá ya se casó con otra y veo difícil que un día regrese con mi mamá. Parece que están mejor de lejos. A veces se enojan, otras veces se toleran, y luego yo tengo que andar de recadera. 

Hace poquito logré reunirlos a todos, fue súper chistoso, porque imagínense en una mesa de un restaurante; nos sentamos: mi papá con su esposa y los dos hijos de ella y mi hermanito menor, yo y mi mamá con su novio y su hijo y su novia. Debo confesar que la mesera se ruborizó un poco al enterarse a quiénes atendía.  

Así que me tengo que dividir, partir mi corazón en dos. Un fin de semana con mi mamá, el siguiente con mi papá; un año, la Navidad con la familia de mi papá y el Año nuevo con la familia de mi mamá, y al siguiente año, cambio: la Navidad con mi mamá y el Año nuevo con mi papá. 

Por eso, les digo, más en serio que de broma que soy: la hija dividida.