Luis Alonso Cruz

Views: 1655

Luis Alonso Cruz parece haber hallado en los cortes perfectos, su propia corona de rosas infernales, aquellas que dejarán esporas que respirar cuando los ojos de nuestros seres más amados, sepan darnos las gracias por esta nada tan llena de vitalidad.

 

Carlos Salinas Granda

 

LUIS ALONSO CRUZ

…No quiero que la noche venga, tengo miedo de perder la razón.

 

➡️ Por Ale Pastore

 

El poeta en su obra nos mantiene sin pausa a la lectura, sencillamente porque en cada verso encontramos su clara voz desde la autenticidad, aquella que nos hace sentir, imaginar y vislumbrar los simbolismos que anuncian que la poesía es su mundo. Luis Alonso Cruz no se resiste a lo enigmático, a la presencia de un Dios y su belleza. Es notoria la empatía que existe entre el que escribe y el que vive, ya que siempre nos sorprende con pinceladas de color, nos envuelve entre metáforas para encontrar respuesta a los vacíos, las carencias, al dolor, a lo dulce y amargo. Al sueño y la realidad, dejándonos una obra que resume perfecto lo que el poeta quiere expresar, la inconfundible autonomía del ser.

 

 

 

SELECCIÓN DE POEMAS

 

 

Tres estudios para la crucifixión

 

Sigue pasando los dientes sobre el hierro,

raspa las costras y la herrumbre,

deja que caiga el último cerezo de junio,

que se claven las espinas en tus pies,

y que grites hasta que los dientes se revienten.

 

¿Por qué volteas y no miras ese vacío?

mira el vendaje que le hiciste

y cómo tu cuerpo se dobla en el equilibrio de la semi rueda.

Alguien recogerá las pequeñas hojas que se desprenden,

de tu arco, invencible como siempre.

Tripartito es el dolor.

 

(Osario de Criaturas Perplejas, 2014)

 

 

3

Llegaron una mañana,

al tercer canto del gallo,

en plena temporada donde los ríos comenzaron a ser

bautizados.

 

Ellos proclamaban las nuevas,

Con el encantamiento oculto de sus palabras

Y el sonido borroso de sus frases.

 

Y en la tarde,

Los fuegos de San Elmo aparecieron sobre la gente,

Y este incendio de cada cuerpo será el pretexto de los

grandes

viajes de exploración;

El fuego de los ojos viendo diamantes,

juguetes codiciados

pretextos largos,

refulgores en los iris

movimiento puro y eterno

en el dinamo interno

y al concebir a los hijos.

 

Todo en este pueblo se volvió un pretexto para los viajes, las

mudanzas,

los rompimientos, el desarraigo.

 

Y aunque el secreto de este fin del mundo siempre

estuvo en el fuego,

en el cementerio con nuestros antepasados

 

¿Qué podían hacer nuestras mujeres?

El hogar ya estaba demacrado.

Los espíritus del mar le habían ganado.

 

4

Y los hijos….

siempre fuimos el rezago

para el fósil del león.

 

En mis manos y en los brazos llevo tatuado

La llave de todo el Purgatorio:

Nómbrame y luego existo

Así fue el deseo de San Marcos –el león– subiendo al cielo,

Así fue el espacio entre sus vértebras,

donde hablar,

era dar vueltas entre ruinas,

Destierros y Llantos.

 

Y este fósil también es un recuerdo

del coliseo en Cantabria,

de la agonía,

de la lluvia golpeando la piel

desnuda y la alegría,

un recuerdo de

las ventanas abiertas,

veleros y mujeres

dando vueltas en el Mediterráneo

de los barcos cargados de personas

con sus sonrisas como maletas,

de las flores incrustadas en la roca,

de los cangrejos y su extraña música.

 

Pero el recuerdo es una cáscara de sal,

Se rompe y sale una voz:

El fósil siempre ha navegado a pesar de nosotros,

El fósil siempre fue nuestro padre.

 

(La Música del Hielo, 2015)

 

 

Lapsus

 

Todo lo he querido contener en una oración

 

 

No, mejor en una palabra

y no sé, si esta escritura

es un simple ejercicio de anatomía

fibras, músculos y tendones expuestos.

 

Con

dagas afiladas

le abrimos el mundo al hijo

y al hijo de este hijo.

Con dagas afiladas le enseñamos

el mar y sus seres

que tengan miedo a lo inmenso

pero

los hijos seguirán naciendo, rasgarán el miedo

serán nubes perdidas en el cielo

 

He despertado,

mi cabeza reposa sobre tus amorosas piernas

mientras estos pensamientos

estas voces del futuro

pasan y abren surcos

grietas en nuestra piel.

 

No quiero que la noche venga,

Tengo miedo de perder la razón.

 

(Hombre Fractal, 2018)

 

 

———————  🪶 ———————

 

 

Luis Alonso Cruz.- Lima, Perú 1981. Ingeniero Industrial de la Universidad de Lima, con doctorado en Educación por la UNINI México. Publicó los libros Tetrameron (2003), Lumen (2007), Radio Futura (2008), Osario de Criaturas Perplejas (2014), La Música del Hielo (2015) Hombre Fractal (2018) y Jardín Mecánico (2020). Ha sido finalista del Premio Nacional de Poesía (Perú, 2019) y del premio Copé de Poesía (Perú, 2021). Así mismo, parte de su poesía ha sido traducida al inglés, italiano, bengalí y uzbeko.

Poemas suyos aparecen en diversas antologías y revistas física y digitales a nivel internacional como Una Invitación–Un poema (Rumbos Editores, Santiago de Chile, 2021), y Antología de Poesía Iberoamericana Actual (Ex Libric ediciones, Málaga, 2018) entre otros.