Villancico

A la usanza de un Lope despistado

o de un Juan del Enzina trastornado,

voy a disponer aquí de un tema villano

porque sí y lo amerita el año,

demos rienda amplia a los desencantos.

Si un mozo me ha rogado quebrantos

y luego me deja sola en el campo

¿He de darle todos los favores

o mejor voy preparando el ocaso?

A vistas leguas que el amor no me fazere

y siendo estos los tiempos de Elle,

tendré que apartarme del mozo fermoso

pues ya mi monedero no tiene billete.

Seguro después de los siglos

este villancico cambiará de aires,

sólo Navidad es tema de los actuales.

Yo reitero que sigue siendo

el mismo conflicto campirano,

el me quiere, no me quiere

así sea Dios o un Santo

igual que tremendo pagano.

Mucho adeudo a los autores

fel muy mi querido castellano

con este agravio al género lírico,

pero de Ese precioso niño,

yo me muero por él,

sus ojitos me encantan,

su boquita también

aprendí que las gloriosas horas

de la contemplación amorosa

terminan en arrebato quejumbroso

y que de nada sirven los siglos

de postreros oros

todos somos pobres menesterosos.