“Cambiar el mundo hacia uno mejor; más preparado”: Herralde

Views: 935

“¿Es el editor un francotirador?”. Con esta pregunta, Marisol Schulz abrió el diálogo durante el Encuentro de Promotores de Lectura en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara. A su lado estaban Jorge Herralde, mítica figura del mundo editorial, y Silvia Sesé, quien ha quedado a cargo recientemente de la labor editorial en Anagrama. Ahondar en la labor de no sólo editar, sino buscar autores, dar seguimiento a sus obras, promover su trabajo, apostar por un nombre y enfrentarse a un texto, es algo que para Marisol Schulz no es otra cosa que trabajo de multitasking. “Para nosotros, Herralde es un mito, sobre todo entre los editores en habla hispana”, agregó la directora de la Feria, respecto al fundador de una editorial que comenzó su labor de manera oficial en el 69, en pleno franquismo, “un momento en que la libertad de expresión estaba totalmente restringida”.

Actualmente, Anagrama cuenta con cuatro mil títulos en su catálogo, dentro de los que destacan autores que para Marisol Schulz han sido cruciales en la formación de miles de lectores en todo el mundo como Patricia Highsmith, John Kennedy Toole, Enrique Vila Matas, Javier Marías, Roberto Bolaño, Sergio Pitol e Ian McEwan. “Anagrama se inició en aquellos tiempos cuando tantos exaltados soñamos con cambiar el mundo”, comentó Jorge Herralde, mientras recordaba el año en que Anagrama publicó el primer libro en su catálogo: un volumen de tinte trotskista, lo cual, según Schulz, puede darnos una idea del tipo de carácter y visión característico de alguien como él. Anagrama, agregó Herralde, también tuvo el atino de apostar por libros con tintes de izquierda y temáticas feministas, anticipándose aproximadamente 30 años al movimiento LGBTTTI.

“El objetivo de la editorial es la búsqueda de la calidad y penetración”, comentó Herralde a propósito de un panorama literario que, desde su perspectiva, cada vez ha bajado más la calidad de los libros que se publican. Marisol Schulz, por su parte, agregó que el editor tiene la responsabilidad de apostar por nuevas voces que siempre busquen ofrecer calidad literaria a los lectores. “El buen editor debe tener ese olfato y buen tino para elegir autores que en su momento aún no son conocidos, pero que saben que tienen algo por ofrecer. El nombre de Anagrama ya es, por sí solo, una garantía de calidad”.

Como promotor de lectura, agregó Schulz, hay que tener conciencia de lo que implica publicar a un autor: darlo a conocer, dar seguimiento a su carrera literaria, ser capaz de enfrentarse a su obra, mover su nombre entre los demás editores. La función de vender a un autor, señaló, es una de las funciones de las agencias literarias, figura relativamente nueva: cuando ellas aparecieron con su propuesta, Jorge Herralde ya estaba ahí. El tino del editor, ese olfato que los hace saber cuándo vale la pena apostar por una voz nueva, para Silvia Sesé, tienen que ver con golpes de entusiasmo, y una labor de filtro y selección. Herralde y Schulz coincidieron en que no se requiere de mucho para saber si hay talento en un manuscrito nuevo que llega a una editorial: “En una o dos páginas lo sabes”, agregó él.

Para Schulz, la apuesta del editor no siempre es fácil, ya que son tantas las lecturas que cada vez resulta menos común conmoverse. “La intuición es fundamental, así como el trabajo. El editor es un animal intuitivo”, concluyó Herralde, seguido por una ola de aplausos que inundaron la sala con entusiasmo.