Ayer y hoy sin mañana
Cuando te enteras que tus bolsillos
Nunca estuvieron rotos,
Simplemente no existieron
Que tu mirada era oscura a pesar del colirio
Que viviste drogándote con su fotografía y voz
Y no con la pasta básica de cocaína
De tus fines de semana
Donde los gallos dejaban, tristes,
De cantar
Cuando tu sintaxis se convirtió
En una sonrisa de época
Y tu piel que ya no erizaba
Y tus labios que servían solo para comer
Y ya no para besar
Porque hasta te robaste el dinero del juego de Monopolio
Y es que nunca quisiste aceptar
Aceptar
Tu adoración a este perdedor
Que escribía versos hasta dormido
Y yo amé
Con mi estilo provinciano
Doméstico, pero limpio
Sincero, pero dulce como una polka
Y con los poemas más espantosos
Que he conocido en mi vida
Con fracasos de venta y crítica
Pero tu querías una alfombra roja
Y yo quería un gato rojo
Tú sábanas de seda negra
Y yo solo piel en lo negro de la oscuridad
Con la música
De tu respiración desesperada
Desesperada, desesperada y feliz,
Sin saber que yo, yo, yo
Secretamente sabe que no existes y
Con la única certeza de ese calendario
Lánguido que no podré ver más el 2024
(Y cuando ya no hay nada que perder, ni filtros ni nada,
La magia es superior y la poesía, recién se vuelve poesía).