De la equitación y la charrería

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Podemos señalar que la equitación es la acción de montar a caballo, puede realizarse como un entretenimiento, en el contexto militar, como una terapia para personas con discapacidad o bien como disciplina deportiva.

También se le ha llamado hípica y de trata de un deporte ecuestre y tiene tres modalidades diferenciadas: doma clásica, saltos de obstáculos y concurso completo.

Ahora bien, hay que decir que México es el país por excelencia de los jinetes amateurs. Entre los jinetes de Alto Rendimiento y Grand Prix, no más de cinco son considerados profesionales.

Así es que es menester mencionar que los jinetes profesionales dedican su vida al arte de montar.  Son aquellos que montan entre 12 y 15 veces al día, son los que cada fin de semana se miran en los mejores eventos del mundo ya que se trata de jinetes que tienen una serie de compromisos comerciales por la cantidad de patrocinadores que confían en su talento y en su proyección internacional.

Así es que los profesionales son sumamente talentosos, tienen en sus manos algunos de los mejores caballos del mundo y forman parte de una élite a la cual el resto de los aficionados a los caballos admiran y respetan, pero no pueden acceder tan fácilmente, así es que los amateur consideran el deporte ecuestre en su vida como su hobby y su pasión. Dedican tiempo, esfuerzo y recursos económicos a completar sus actividades diarias. Son jinetes cuyas fuentes de ingreso provienen de otro tipo de industrias. Al final son los jinetes amateur los que conforman el grueso de la equitación y quienes también le inculcan a su familia el amor por el deporte.

Por otra parte pero no ajeno al tema, y ya que hablamos de México vale la pena comentar sobre la Charrería, que sin duda es un motivo de orgullo y tradición de la cultura mexicana. Su práctica combina la equitación con diversas formas de jaripeo, actividades ecuestres y formas tradicionales de la ganadería. Entonces en México, la Charrería es considerada como deporte nacional por excelencia desde que fue registrada en la Comisión Nacional del Deporte. Está se lleva a cabo en Lienzos Charros los cuales son instalaciones especialmente diseñadas para su práctica junto con un caballo y un jinete al que se le ha denominado charro.

Este deporte tiene sus raíces en los estados de Hidalgo y Jalisco, convirtiéndose en una de las tradiciones mexicanas más representativas de nuestra cultura. Así es que como escuela Hípica, se origina en los llanos de Apán en Hidalgo y tras pasar la Revolución mexicana a principios del Siglo XX, se le considera como Deporte Nacional cuando los antiguos terratenientes emigran a ciudades como la Ciudad de México y Guadalajara, donde se comienzan organizar en asociaciones que gradualmente se extendieron por todo el país dando lugar a la Charrería Organizada.

No hay que olvidar la vestimenta en la Charrería. Pues los orígenes del traje de charro, provienen de la misma actividad en el campo, desde que a los nativos de la Nueva España, se les permitió montar a caballo y realizar las faenas propias de sus actividades. El Traje de faena: Se compone de sombrero de palma, camisa sin cuello, saco de tela o gamuza sin adornos. Pantalón sin bolsa trasera, botines de piel y el general se utilizan colores en tonalidades café o gris, corbata discreta de moño colgante estilo mariposa. Ahora bien, el traje de media gala: Sombrero de fieltro, camisa de cuello volteado, corbata elegante haciendo juego con el traje, chaqueta de gamuza o casimir con tres presillas en cada manga y broche lujoso en el pecho. Pantalón con botonadura de plata en cada lado. Cinturón con adornos de acuerdo a los colores y materiales de todo el conjunto. También hay que mirar el traje de gala: De color gris, azul obscuro o negro, con sombrero galoneado y botonadura de plata desde la cintura hasta el tobillo, exige adornos discretos pero finos, pistola con funda bordada. Camisa de cuello volteado y chaqueta del mismo material. Corbata discreta con bordados finos de preferencia plateados haciendo juego con la botonadura y el sombrero.