El mundo fascinante de Julio Verne
Con sus aventuras se adelantó a su tiempo, anticipando a quienes tuvieran la mente abierta, los avances tecnológicos que dominarían el mundo en los próximos años.
VIAJES Y AVENTURAS DEL CAPITAN HATTERAS (1866)
Richard Shandon y el Dr. Clawbonny reciben cartas para acudir con una expedición desconocida a un destino igualmente desconocido. Shandon es autorizado para reunir la tripulación y efectuar la construcción de la nave para esta aventura. El primer destino es la bahía de Melville, aunque posteriormente se sabe que el fin perseguido es llegar al Polo Norte.
Curiosidades: Oficialmente es el primero de los Viajes Extraordinarios ya que así se lee en la portada del libro.
En el relato, el autor aprovecha la oportunidad para reseñar las aventuras de las expediciones reales.
Seguimos con los datos de anticipación asombrosa, pues el Polo Norte se alcanzó ¡40 años después de publicada la novela!
El desierto, así como el hielo son elementos que se encuentran recurrentemente en las obras del autor y de las que es necesario interpretar, de lo cual hablaremos más adelante.
Hatteras es el primer personaje en esa sucesión de hombres que se bastan a sí mismos, y que luego engrosarían Nemo, Fogg, Srtrogoff, etc. Y su voluntad queda retratada en esa grandiosa frase que pronuncia cuando ya se encuentra a la vista del objetivo de su vida: No hay obstáculos infranqueables; sólo voluntades más o menos enérgicas.
En parte, esta historia se apoya en la teoría de un mar sin hielo. Hay un mar líquido donde debería haber hielo eterno, pero ¿quién puede negar que se haya derretido cuando Hatteras pasó por ahí? ¿es quizá un guiño al derretimiento de los polos? Varias de sus novelas predicen cambios climáticos y sociales.
Los invito a que la lean y disfruten de ella, a mí, el Epílogo me puede fascinar, sobre todo porque genera un canon en los finales de las películas y series hoy en día.