Reseña del Conde de Monte-Cristo
El Conde de Monte-Cristo es una novela de Alejandro Dumas que tiene muchos años desde su creación pero que entraña, desde la literatura, una gran cantidad de enseñanzas que son aplicables hoy en día. El trasfondo de dicha lectura, es que es una obra que tiene como finalidad aumentar la confianza de una persona (lo cual es muy necesario para los jóvenes), es decir, que, si estamos pasando por un proceso de cambios o de adaptación que requiere de mucho tiempo o esfuerzo, la historia del conde puede sernos de utilidad para encontrar comprensión e inspiración.
La razón es muy sencilla, la historia del Conde versa sobre una persona llamada Edmundo Dantes que por una mala jugada de los amigos que lo envidiaban termina durante años e una prisión, misma donde conoce a un viejo abate italiano que lo instruye en muchas áreas del conocimiento y que al morir le deja su tesoro escondido en la isla de Monte-Cristo; esa visión puede asemejarse a cualquier persona que tiene mucho trabajo por hacer pero que quiere lograr un objetivo en especial.
Dicha historia se asemeja muchísimo al poema de Ítaca de Konstantino Kavafis, puesto que, el destino, en este sentido Ítaca o la venganza de Monte-Cristo no implica que las cosas deban ser fáciles, las cosas deben ser lentas y difíciles pues lo importante es el camino; en este tenor, habría que analizar el elemento de la venganza dentro de dicha historia, puesto que difícilmente los lectores estarán leyendo a Dumas precisamente porque quieren vengarse de alguien; la venganza se hace presente dentro del contexto de la propia obra pero habría que darle un significado en el día a día para poder darle sentido a las enseñanzas de la novela, siendo que la venganza podría considerarse realmente cualquier objetivo, en mi caso, el objetivo a salir adelante.
En este tenor, resaltan varias aptitudes del Conde que utiliza para tal efecto, primero que nada, su capacidad para poder tener amistad con cualquier persona, esto haciendo favores, la posibilidad de poder hacerse del agrado de cualquier persona en cualquier contexto es una aptitud poco analizada pero que implica que en cualquier contexto debemos buscar agradar a los demás (obviamente de manera coherente y verdadera), porque no sabemos en que momento podemos necesitar de los demás.
El segundo punto que aventaja al Conde es la capacidad para hacerse de información, puesto que nadie puede hablar de lo que no conoce y es una virtud poder estar capacitado para cualquier ambiente. Finalmente, la mayor enseñanza del libro, confiar y esperar, pues para llegar a cualquier meta es necesario ser paciente, haciendo las cosas bien y buscando dicha meta.
Claro que la historia del Conde de Monte-Cristo también tiene algunos errores, por ejemplo, llama la atención que los personajes abiertamente compartían todos sus problemas o ideas con el Conde, quien era una persona extraña, eso suena un poco inusual, que si tienes un problema familiar corras a contarle a la persona que acabas de conocer, pero si es cierto que si demostramos un interés sincero hacia los demás estos compartirán su amistad y aprecio para con nosotros.
La obra en cita, implica el análisis de una serie de habilidades sociales que deben destacarse, analizarse y aplicarse, en este sentido, el Conde de Monte-Cristo enseña a lograr todos nuestros objetivos confiando y esperando.