DESPEDIDA
Cero explicaciones, por favor.
Las lágrimas, sólo si caen rápido , y sin arcadas,
porque, ¿cómo duele tanta historia, no?
Por eso, no me toques la nariz, ni la bragueta, ni el pelo,
ni nada,
porque hasta esta hora de los últimos errores
huele a quemado
y no soy yo.