+ Destinados al Fracaso, la Consulta y el Gobierno del Engaño

La frase

Este sábado se dio el lamentable fallecimiento de Marco Antonio Hernández Vásquez, subdirector de la Dirección Jurídica y Consultiva, entre otros puestos.

HAY UN DIABLO ROJO MAS EN EL CIELO

CON EL TOLUCA: Iniciar con un triunfo es irrefutable y más en casa ajena, ante un técnico experimentado y un equipo en reestructuración. Toluca, por momentos mostró un buen futbol, pero también fallas que urge corregir o erradicar. No es posible que Martín Galván, durante quince años perdido en el futbol mexicano les haya hecha por segunda ocasión un gol, para sumar solamente dos en su cuenta.  Ahí fallaron tanto Torres Nilo en la lateral, como Haret Ortega en la cobertura.

Hay varias cosas a destacar, primero el uniforme. Toluca volvió al clásico blanco con dos rayas en el pecho. Segundo un nuevo y potente patrocinador: Roshfrans que también auspicia a Pachuca y León.

Buen futbol en cuanto a ir al ataque, se debieron concretar más opciones, pero se falla por poco, así lo hicieron ver Ian González quien en este encuentro mostró mucho más que Triverio en un torneo. Estrada sigue fallando a la hora del remate. Castañeda parece recuperar la forma.

No se puede dejar pasar la doble falla en el penal que pudo haber dado una ventaja de dos por cero, en que Canelo primero y Sambu, después, fallaron en el tiro inicial y el contrarremate. Sin embargo, ambos se repusieron, Canelo con un golazo y Sambu con un penal bien ejecutado.

Tres puntos de oro en materia de porcentaje.

Ahora a recibir el próximo domingo a los Tigres del Piojo, en el que será el primer juego en el estadio Nemesio Diez, ya con público, aunque restringido por la pandemia. Ojalá no le hagan confianza al equipo norteño.

Destinados al Fracaso, la Consulta y el Gobierno del Engaño

El próximo domingo se llevará a cabo en México la primera consulta popular constitucional, pero con el sello de la 4T: engañando al pueblo, consultado para cumplirle un capricho más al Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador en sus arranques de autoritarismo, venganza y obsesión por la concentración absoluta del poder. Cortinas de humo para ocultar el incendio.

Dice no estar de acuerdo con el juicio a los ex presidentes, pero proclama a los cuatro vientos su linchamiento mediático. Tirar la piedra y esconder la mano.

Dice que no va a acudir el próximo domingo a votar, pero viola nuevamente la ley electoral al promover que otros vayan a votar por el juicio a los ex presidentes, en plena veda propagandística para el sector público y a sabiendas que otra es la pregunta que contiene la consulta popular. El tema como distractor del fracaso.

Dice que la consulta popular es para que se enjuicie a los ex presidentes, pero la Suprema Corte de Justicia de la Nación y el Instituto Nacional Electoral ya aclararon que eso es mentira, y por ello le rechazaron su pregunta por contravenir el Estado de Derecho y las garantías constitucionales de las personas y a la presunción de inocencia. Siempre el engaño como treta para ocultar las fallas.

Dice que los ex presidentes merecen ser juzgados por traición a la patria, pero en lugar de presentar las pruebas y promover los juicios directamente ante la Fiscalía General de Justicia, que para eso sí tiene plenas facultades, prefiere el show mediático, tirar nuevamente dinero a la basura en un ejercicio destinado al fracaso electoral y procesal, pero a cambio lo regatea en la compra de medicamentos.

Dice que los ex presidentes del neoliberalismo son los culpables directos de todas las desgracias del país, pero es precisamente su gobierno el que ha llevado a la nación a los peores escenarios en materia de seguridad, economía, crecimiento y desarrollo, endeudamiento, pobreza, desempleo, feminicidios, narcopoder, deterioro de la salud y de la educación, muertes a causa de la violencia.

Dice que hay que acabar con el neoliberalismo, pero han sido justamente las medidas neoliberales, como el Tratado de Libre Comercio de América del Norte, el Banco de México, el Instituto Nacional Electoral, los fideicomisos y las instituciones autónomas del Estado Mexicano, las que han evitado el fracaso total del gobierno de la 4T en sus primeros tres años de gestión con sus medidas estatistas de la economía cerrada del México de mediados del siglo pasado.

Dice que no va a intervenir en la sucesión presidencial, pero arma todo un aparato propagandístico del proceso sucesorio para salvar del descrédito de corrupción e ineptitud a sus dos principales cartas de sucesión: Claudia Sheinbaum y Marcelo Ebrard; y para aniquilar a su principal amenaza sucesoria: Ricardo Monreal, haciendo de la política un teatro de carpa con todo y su lenguaje de corcholatas y mascabrothers.

Dice que respeta la división de poderes, pero ya tiene cautivos a los poderes Legislativo y Judicial, a los que humilla constantemente con ordenanzas públicas para que las obedezcan en los tiempos y en los términos que va la instrucción directa, con decisiones contrarias a la democracia, la transparencia y el desarrollo equitativo, pero privilegiando el empoderamiento de la figura presidencial.

Dice que es demócrata y por eso respeta la autonomía de los gobiernos estatales y municipales, pero ya les arrebató el manejo presupuestal, la función de la seguridad pública y toda la operación política, gestión social y de obra pública a través de los súperdelegados federales, lo mismo en el gobierno de la Ciudad de México, que en las entidades federativas y en los municipios del país. Nada se hace en el territorio mexicano si no obedece al capricho y al interés presidencial.

Dice que respeta la Ley, pero a cada paso que da la violenta o la alinea a sus necedades, dejando a la población sin educación de calidad, sin medicamentos, sin inversión privada nacional y extranjera, sin energías limpias, sin competencia en el mercado y sin libertad de expresión para sus críticos.

Dice que no ha mandado al diablo a las instituciones, pero sigue empeñado en destruir al Banco de México, al Instituto Nacional Electoral, al Inegi, al Coneval, al Instituto Nacional de Acceso a la Información (INAI), como ya lo hizo con la CNDH, el Conacyt, Notimex, la CONADE, los fideicomisos, los medios de comunicación del Estado Mexicano para convertirlos en su aparato propagandístico ideológico.

Dice que no va a robar, ni mentir ni traicionar al pueblo, pero nada hace por castigar los robos denunciados que involucran a sus hermanos, primos, familiares, colaboradores y compadres. Desde el púlpito mañanero de Palacio Nacional no se cansa de lanzar ofensas, amenazas, medias verdades y mentiras, a tal grado que le han contabilizado más de 50 mil en lo que va de su gestión, y aun así se erige en juez para sancionar las “mentiras” de la prensa nacional y extranjera. En todo momento engaña a la opinión pública maquillando las cifras, falseando la realidad y mostrando un mundo fantástico que sólo existe en su mente.

Dice que siempre hablará con la verdad al pueblo, pero en ningún momento reconoce los errores de su gobierno y en todo momento encuentra un culpable, dentro o fuera del país, siempre serán sus enemigos los culpables de todas las desgracias, los errores y los fracasos de su movimiento transformador.

Dice ahora que va a consultar al pueblo sobre algo que ya la Suprema Corte de Justicia de la Nación le rechazó por su evidente inconstitucionalidad, dado que no se puede poner a consulta popular la aplicación de la Ley.

Pero aun la consulta del próximo domingo, que no es para que se enjuicie a los ex presidentes, necesitaría de la participación del 40% del padrón electoral nacional, que equivale a más de 37 millones de mexicanos acudiendo a las urnas.

Que siga la farsa de la Cuarta Transformación. Al pueblo pan y circo para que no se ocupe de los problemas reales del país: feminicidios, masacres, desempleo, pobreza, ¿no le parece a usted estimado lector?