HUBO MANIFESTACIÓN ANTES DE LA ENTREVISTA DE AMLO CON BORIC
Con la entonación de los himnos Nacional Mexicano y de Chile, en el Palacio la Moneda, comenzó la visita oficial del presidente Andrés Manuel López Obrador en suelo chileno, en donde este lunes participará en la conmemoración de los 50 años del golpe de Estado.
Con una alfombra roja a su paso, el presidente López Obrador llegó al Palacio La Moneda, sede del gobierno chileno, para sostener una reunión con Gabriel Boric, para después ofrecer un mensaje conjunto.
Horas antes de que Gabriel Boric recibiera al presidente, miles de chilenos marcharon en el centro de Santiago para conmemorar los 50 años del golpe de Estado y rendir un homenaje a las víctimas.
En esta protesta participó el mandatario chileno, Gabriel Boric, quien se sumó a las agrupaciones que convocaron a esta protesta, como lo es la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos.
Gabriel Boric destacó la apertura de la Embajada de México en Chile para recibir a obreros y campesinos que huían del golpe de Estado: “El Estado de México recoge, le da asilo, a miles de chilenos que fueron privados de su patria”, dijo Boric.
Señaló que el presidente López Obrador no acorstumbra salir del país y se dijo honrado de recibirlo en una fecha simbólica para los chilenos.
“Las historias de nuestros países están entrelazadas, cruzadas, por gestos de generosidad, pero también tienen que ver con el presente y el futuro, en materia económica, científica, tecnológicas, educaciones y culturales”, dijo Boric.
Destacó la labor de Alicia Bárcena, hoy canciller, así como de Beatriz Gutiérrez Müller, esposa del presidente López Obrador, por recuperar el legado de Gabriela Mistral.
Gabriel Boric habló del intercambio cultural entre los países, tanto el plano de la literatura como en el plano música, mencionando a Gabriela Mistral. Le agradeció la solidaridad de México por el asilo a chilenos cuando la situación en Chile era difícil.
El presidente López Obrador habló en primera instancia de su formación académica, que desde el primer semestre tuvo que enfrentar con la noticia del golpe de Estado en Chile. Recordó que en sus clases de análisis sobre lo ocurrido, vislumbraron la posibilidad de un hecho que se consumó el 11 de septiembre de 1973.
“Esto me impactó mucho, me marcó. El presidente chileno Salvador Allende que todavía gobierna con su ejemplo es el dirigente extranjero que más admiro. Quien más sentimientos me genera, fue un humanista, un hombre bueno, víctima de canallas. Se decía en aquel tiempo hablando del presidente Allende que ser ‘joven y no ser revolucionario es una contradicción’, pero ser revolucionario no necesariamente implica tomar las armas. Allende eligió un camino diferente”, dijo López Obrador.