Lo que amo de él
Sus ojos terriblemente estadounidenses
Su cautivante sonrisa y las pecas que decoran su espalda
Que es maestro, ñoño y divertido; combinación perfecta
Lo tierno que es como papá
Su amor por las verduras y lo sano que dice ser
Aunque descubro que come azúcar en las madrugadas
Y se toma mis coca-colas, según él, sin placer
Me encanta su español casi perfecto
Aunque aderezo, anfitrión y frasco
Sean palabras de alta complejidad para él
Amo como se adueña de mis sonidos
Y de algunas palabras o frases que uso al atardecer
Pero también amo su Hum
Que significa qué raro, déjame pensar, no lo creo, qué curioso y otros cien significados más
Me encanta como baila en calcetines cuando cocina
Y su manera de mirarme al cantar
Es bello cuando se enoja al decirle que su corte de cabello no es el mejor
Pero como se deja su barba sólo para gustarme más
Odio, pero también amo que casi siempre tiene la razón
Me cae mal, pero me excita su cara de satisfacción cuando sabe que me ganó –en una discusión, en un juego o acertando en una respuesta–
Esa misma cara presumida que pone al hacerme el amor
Tan confiado, tan seguro de sí
Sabiendo exactamente qué hacer para volverme loca
Amo los poquitos celos que demuestra cuando enseño de más en mis fotos de redes sociales
Me divierten sus predicciones absurdas, pero que resultan ser ciertas
Me encanta como me deja besarlo y tocarlo en cualquier sitio menos en Shake Shack
Me enloquece que siempre hace caras chistosas cuando lo quiero fotografiar a mi lado
Pero más terrible es que me toma las peores fotos del mundo, en poses feísimas y con las caras más extravagantes que puedo hacer
Amo su corazón noble
Sus ojos con lágrimas al ver una película emotiva
Me gusta cómo defiende sus ideas
Y como se preocupa por la injusticia y la discriminación
Me encanta que a todos nos puede curar el corazón y el resfriado con una de sus increíbles sopas
Amo que me saque a bailar, aun cuando odio bailar, y con música inexistente en su comedor, solo guiándome por la fuerza de sus brazos alrededor de mi cuerpo
Me impresiona lo mucho que me conoce
Sabe qué pienso, cómo lo pienso y para qué lo pienso
Me gusta cuando me pone de ejemplo el monstruo de colores cuando estoy enfadada o triste
Valoro todo lo que me enseña, desde conocer nuevas comidas, como el espárrago, hasta enseñarme a conducir sin temer por su vida
No hay nada mejor que sus llamadas por la noche cuando reímos y nos contamos como fue el día sin nosotros
Pero claro, amo más dormir a su lado, cómo me abraza, como engancha mi pierna con su pierna y el calor de su cuerpo, aunque estemos a varios grados bajo cero
Amo que su pecho es la mejor almohada y que siempre recuerda la forma en la que encaja mi cabeza a la perfección
Me enternece cómo disfruta que lo toque y que lo duerma con caricias en la espalda
Y por supuesto que me fascina cómo nos cansamos antes de dormir
Como ostenta orgulloso el título de darme más orgasmos en un día
Amo lo sexi que es cuando juega billar o hockey, cuando baila haciéndose el sexi, cuando hace lagartijas, cuando se ducha y se recarga en la pared con el agua cayéndole por la espalda, bueno, básicamente en todo momento es sexi
Amo cada centímetro de él, pero más amo en lo que nos convertimos cuando estamos juntos.